COMEL cuenta con un equipo de
asesores de fábricas de pienso en toda España
que ofrece un servicio personalizado en relación
al almacenamiento, manipulación e incorporación
de melazas. Hemos intentado recopilar de los números
anteriores, las recomendaciones mas importantes, que
permitirán conseguir un porcentaje óptimo
de adición de melaza.
Hay que tener en cuenta que, muchas
veces, el poder añadir mayor cantidad de melaza
no depende de la incorporación de maquinaria
mas moderna, sino simplemente del correcto funcionamiento
de la que se dispone. Estos pequeñas variaciones
han supuesto a un buen número de fábricas
una considerable reducción de los costes de fabricación.
TANQUES
Los tanques de almacenaje de hasta
60 toneladas deben:
Ser verticales y cilíndricos:
Estar instalados sobre patas o zócalos.
Tener un fondo cóncavo en su interior y un techo
abovedado.
Tener una salida central de 100 mm y una válvula.
Estar
termo aislados.
Tener un indicador de contenido.
Tener al menos un conducto de ventilación de
100 mm.
Tener una boca de inspección adecuada.
Tener un equipo de limpieza y vaciado.
Tener un serpentín calentador de agua caliente.
Tener una tubería de llenado de 100 mm en la
parte superior.
Tener un indicador de temperatura.
En caso de ser posible, los tanques de almacenaje deben
situarse en el interior de los edificios, o al menos,
protegidos de corrientes de aire frío.
TANQUES DE
SERVICIO
Los tanques de servicio deben:
Tener una capacidad igual a 4 horas
de producción.
Calentarse con un serpentín de agua caliente.
Estar totalmente bajo cubierto y debidamente
termo aislados.
Tener controles para mantener constante el nivel de
melaza.
Tener un indicador de la temperatura.
Ser capaces de controlar la temperatura de la melaza
a 40º C.
Tener un equipo de limpieza y vaciado.
Ser accesibles para su mantenimiento y observación.
Tener una tubería de alimentación de 100
mm en la parte superior.
TUBERÍAS
Las tuberías de las líneas
de producción deben ser:
De 100 mm de diámetro para llenar
los tanques.
De 100 mm de diámetro para conectar distintos
tanques.
De 100 mm de diámetro entre el tanque y la bomba
principal de transferencia.
De 100 mm de diámetro en cualquier sistema de
canalización circular.
De 100 mm de diámetro entre las bombas principales
y los tanques de servicio.
De 100 mm de diámetro entre los tanques de servicio
y las bombas dosificadoras.
De 50 mm de diámetro entre las bombas dosificadoras
y las mezcladoras, las melazadoras y los acondicionadores
de las prensas.
Sin empalmes múltiples y con los mínimos
cambios de diámetro posibles.
La melaza no puede ser “aspirada”. Se necesitan
tuberías cortas que introduzcan la melaza en
la bomba por anegación.
Evitar en lo posible los cambios de diámetro
en las tuberías.
Nunca deben utilizarse filtros en forma de `Y´
en las tuberías de entrada o salida.
Una tubería de 25 mm de diámetro
produce una restricción del flujo 16 veces superior
a la que produce una tubería de 50 mm de diámetro
CALENTAMIENTO DE LA MELAZA
La viscosidad de la melaza se reduce
en un 50% al aumentar 5º C la temperatura.
El medio calefactor debe ser agua caliente a una temperatura
máximo de 60º C.
El mejor método de calentamiento consiste en
un serpentín de 50 mm de diámetro en el
tanque y una bomba de agua caliente para hacerla circular.
La temperatura de la melaza debe controlarse
termo- estáticamente
a 40º C como máximo.
El calentamiento con vapor, incluso a presiones muy
bajas, puede crear temperaturas de hasta 116º C
en la melaza.
La temperatura de 116º C produce caramelización
de la melaza, reduciendo su valor en los piensos y creando
problemas de producción.
Los tanques y las tuberías deben estar aislados
térmicamente para conservar el calor y mantener
una viscosidad constante, con objeto de obtener el máximo
potencial de absorción.
BOMBAS
Utilizar bombas de desplazamiento positivo, baja
velocidad y alimentación por anegación con válvula de
seguridad integrada. Las más eficaces son las
siguientes:
LÓBULO ROTATIVO
ENGRANAJES
ESTATOR/ROTOR
ASPAS DESLIZANTES
PERISTÁLTICA
Las especificaciones de la bomba deben
corresponderse con la aplicación y la viscosidad
de la melaza.
La velocidad de las bombas de melaza debe oscilar entre
100 y 300 rpm.
Las bombas dosificadoras de velocidad variable deben
tener un conmutador de baja velocidad para cuando se
desee añadir un porcentaje menor de melaza.
Las bombas de melaza deben tener una válvula
integrada de escape de presión.
CONTADORES
Son fundamentales, ya que hay que tener
en cuenta es que cada tonelada de melaza infrautilizada
equivale a una tonelada de pienso vendido al precio
de una tonelada de melaza.
En la práctica, los únicos contadores
recomendados para las melazas son los electromagnéticos:
Su precisión es extrema.
No requieren protección con filtros, dado que
no contienen componentes móviles.
Pueden conectarse fácilmente a los sistemas de
control automático de las prensas de granulado
y a los sistemas informatizados de la fábrica.
Existen modelos para una gran variedad de tamaños
de tubería.
No requieren limpieza ni mantenimiento.
INSTRUMENTACIÓN
En la fábrica, la melaza está
contenida en tanques y tuberías y el líquido
rara vez queda a la vista. Para conocer lo que está
sucediendo, son esenciales los siguientes instrumentos.
Indicador de contenido en cada tanque.
Indicador de temperatura en cada tanque.
Indicador de presión en la cara de presión
de cada bomba principal y de cada sistema de canalización
circular.
Contadores en la cara de presión de cada bomba
dosificadora.
Sistema de alarma cuando se supera un determinado nivel
o interrupción automática del llenado
de los tanques para evitar su rebosamiento.
Nunca deben utilizarse válvulas complejas de
control del flujo para ajustar la velocidad del flujo
de melaza. Son preferibles las bombas dosificadoras
de velocidad variable.
Verificar los niveles de utilización revisando
todas las semanas los registros informatizados de existencias
con el resultado de las comprobaciones físicas.
MANEJO
No debe intentarse aumentar el nivel
de humedad de la melaza, ya que podrían producirse
problemas en la producción. Con las altas temperaturas
del verano, puede producirse fermentación. El
mayor nivel de humedad en la melaza añadida a
la harina reduce la posibilidad de aumentar la temperatura
de la harina mediante la aplicación de vapor
en el acondicionador de la prensa.
Nuestro servicio técnico, de forma gratuita,
esta a su disposición para cualquier duda que
tengan, bien mediante consulta telefónica o visita
a la fábrica o explotación.
|